Consejos Saludable

¿Cómo recuperarse de una gripe?

Consejos para recuperarse rápido de los molestos síntomas de la gripe. Además de cumplir con las pautas del médico, hay otras recomendaciones. Quédate en casa.

· Se recomienda descansar entre 3 y 7 días, dependiendo del caso. “El reposo es fundamental porque no somete al organismo a un estrés adicional al de la propia infección. Especialmente el sueño ayuda a reparar los órganos afectados y recuperar las defensas.

· Una gripe tiene una duración de entre 5 y 7 días. Se considera recaída cuando reaparecen los síntomas y el virus se aísla de nuevo, pero en este caso es un hecho realmente excepcional. En esta enfermedad no suele haber recaídas. Lo que sí pueden desarrollarse son complicaciones, típicamente neumonía, al cabo de 7 a 14 días. Pero tampoco llega a ser producto de la gripe, sino de bacterias, usualmente los llamados neumococos; y si el paciente es niño, estafilococos.

· Seguir el tratamiento. Lo habitual es que el médico haya pautado un tratamiento sintomático con analgésicos y mucolíticos. La administración de fármacos antivirales tiene escaso o nulo impacto en personas sanas. No así en personas con las defensas disminuidas.

· Reponer líquidos. Para reponerse de la gripe, hay que beber mucho líquido. La tos, la fiebre y la sudoración suponen una pérdida de líquidos muy importante que hay que contrarrestar. No solo únicamente agua. También se puede beber infusiones, caldos, zumos naturales y miel con limón.

· Tomar bebidas tibias. Para recuperarse de una gripe se deben escoger mejor líquidos que se encuentren a una temperatura ambiente o incluso que estén templados. Se prefieren las bebidas tibias para facilitar la recuperación progresiva y evitar cambios térmicos en las vías respiratorias que pudieran ralentizar o dificultar la respuesta inflamatoria contra el virus.

· Abrigarse. ¿Me abrigo o me quito ropa? La eterna duda cuando se tiene gripe. En general hay que abrigarse, excepto cuando la fiebre es muy elevada o el paciente padece enfermedades que pueden descompensarse como insuficiencia cardíaca, epilepsia, convulsiones febriles.

· Evitar el ejercicio físico. Es probable que no se tenga ni ganas, pero si entran tentaciones de ir al gimnasio o entrenar para esa carrera que tienen pendiente, mejor que descarten la idea. El cuerpo se verá sometido a un "doble estrés": combatir el virus y el propio ejercicio físico.